jueves, 31 de enero de 2013

Locura organizada

Siguiendo con la metáfora del manicomio, los locos entran y salen, sí. Pero alguien se ocupa de mantener el suelo limpio, los globos hinchados, la administración de fondos, las capas de pintura blanca, la logística del servicio de comidas, el presupuesto de las escapadas... La administración general es organizada, responsable y eficiente. No puede existir la locura si no existe el orden. Son dos caras de una moneda. La razón nos hace apreciar los arranques de caosidad, y valorarlos.
Y un plan B, siempre un plan B, y C, y D... Hay letras de sobra en el mundo. El truco es invertir la proporción progresión-riesgo consecuente. Entonces se mantiene el matiz de improvisación. El toque de genialidad. Cada uno elige su propia forma de vida. Yo, al parecer administro un manicomio.

miércoles, 30 de enero de 2013

No hay límites

Una sucesión de hechos extraños, sin demasiada conexión que asimilan mi vida al interior de un manicomio, todo feliz, con globos, camisas de fuerza rotas, risas y gritos, volar, locuras. Locuras por todas partes. No hay puertas, están arrancadas. La luz del sol, luna y estrellas de noche, tampoco hay techo. Cada loco trae algo nuevo, emocionante, feliz, una idea, un plan. No hay vallas, libertad absoluta, meros trámites para algunas salidas. ¿Saltar desde arriba de la torre? Se puede, porque en vez de caer volarás, escuchando música, gritos, risas. El corazón se sale del pecho, aumenta la velocidad del entorno, la condensación de las horas que pasan, y las listas. Listas interminables, apasionantes. Una sonrisa de oreja a oreja, como el gato de Cheshire (¿te suena?), cuando salgo fuera. La gente me mira y quiere saber mi secreto. No hay límites. Ninguno. La respuesta a todo es ¿por qué no? El deseo marcará el camino.
 Y parezco tan normal. Solo una chica contenta por la calle, que anda como una niña, a pasos grandes, sonriendo.
De acuerdo.

martes, 29 de enero de 2013

Un mundo sin fin

De pronto, sin esperarlo. En fin. Estaría bien.
Mi vida es desbloquear logros. Logros cada vez más y más rebuscados, complicados, atractivos, seductores. ¿Qué me falta? ¿Una isla? ¿Vivir en Manhattan? ¿Casarme en Las Vegas? ¿Más carreras? Tantos logros ocultos... ¿Cuál será el próximo?

lunes, 28 de enero de 2013

El vencedor está solo

"El espejo refleja la verdad. No se equivoca porque no piensa. Pensar es esencialmente equivocarse."
P.C.

sábado, 26 de enero de 2013

Media vida

Yo quiero ser llorando el hortelano
de la tierra que ocupas y estercolas,
compañero del alma, tan temprano.
Alimentando lluvias, caracolas
y órganos mi dolor sin instrumento,
a las desalentadas amapolas
daré tu corazón por alimento.
Tanto dolor se agrupa en mi costado,
que por doler me duele hasta el aliento.
Un manotazo duro, un golpe helado,
un hachazo invisible y homicida,
un empujón brutal te ha derribado.
No hay extensión más grande que mi herida.
Lloro mi desventura y sus conjuntos
y siento más tu muerte que mi vida.
Ando sobre rastrojos de difuntos,
y sin calor de nadie y sin consuelo
voy de mi corazón a mis asuntos.
Temprano levantó la muerte el vuelo,
temprano madrugó la madrugada,
temprano estás rodando por el suelo.
No perdono a la muerte enamorada,
no perdono a la vida desatenta,
no perdono a la tierra ni a la nada.
En mis manos levanto una tormenta
de piedras, rayos y hachas estridentes
sedienta de catástrofes y hambrienta.
Quiero escarbar la tierra con los dientes,
quiero apartar la tierra parte a parte
a dentelladas secas y calientes.
Quiero minar la tierra hasta encontrarte
y besarte la noble calavera
y desamordazarte y regresarte.
Volverás a mi huerto y a mi higuera:
por los altos andamios de las flores
pajareará tu alma colmenera
de angelicales ceras y labores.
Volverás al arrullo de las rejas
de los enamorados labradores.
Alegrarás la sombra de mis cejas,
y tu sangre se irán a cada lado
disputando tu novia y las abejas.
Tu corazón ya terciopelo ajado,
llama a un campo de almendras espumosas
mi avariciosa voz de enamorado.
A las aladas almas de las rosas
del almendro de nata te requiero,
que tenemos que hablar de muchas cosas,
compañero del alma, compañero.

                                              M.H.

viernes, 25 de enero de 2013

Caminante no hay camino

Cuando la segunda agenda complementaria se termina de cubrir con una tercera capa de post-it´s, comienza uno a plantearse como anda de corazón, por si acaso. Tan poco tiempo... Tantas ganas de hacer cosas que jamás podré hacerlas todas. Un código cromático nuevo para aliviar la gestión organizativa. Y siempre tiempo, tiempo...

jueves, 24 de enero de 2013

Decisiones, cambios...

Una situación complicada, la de ahora. Seguridad arriesgada por un lado y riesgo con seguro por otro. La diferencia es muy sutil. Es emocionante, cómo el cansancio puede dar la felicidad. Estar ocupada, sentirme útil, me hace feliz. Dejarlo correr y hacerlo lo mejor que pueda.

martes, 22 de enero de 2013

Fuerza de voluntad

Acerca de los objetivos y metas, es difícil hacer un esfuerzo continuo, pero una vez te acostumbras dicen que es más fácil. Dicen. Porque yo aún no me he acostumbrado. Es difícil. Sin embargo, un motivo, un pensamiento, cualquier cosa que impulse a continuar es una gran ayuda.
Respecto a la fuerza de voluntad en otros sentidos... Saber que algo está mal, que no debería ser, que es complicado, y aún así querer mucho algo, pero mantenerse a base de fuerza de voluntad, con la imaginación por las nubes, el autocontrol de descanso y las ganas de vivir experiencias inundando a los vecinos de abajo. Como explicarlo...

¿Por qué destruir universos?

lunes, 21 de enero de 2013

Ventanas

Las personas son ventanas a otra vida. Cuando pasa una cerca ves por esa ventana un trocito de su vida. Tal vez aprendes algo, tal vez te guste más, o menos. Algunas ventanas están abiertas de par en par. Puedes dar un paseo, ponerte cómodo, pasarlo bien y volver cuando quieras. Otras están cerradas a cal y canto. A través de un cristal opaco apenas se entreven los colores que sabes que hay al otro lado. Otras, sin embargo, están entreabiertas. Y dentro hay un recibidor, para curiosos. Suficiente para guardar las apariencias, suficiente para satisfacer a los intrusos. No hay mucho que ver. Un ambiente variado, con gustos para todos. El caso es que no hay más puertas, solo la ventana por la que has entrado. El mensaje que trae esta habitación es sencillo: "coge lo que necesites y vete".

domingo, 20 de enero de 2013

Futuro

Un nombre, así me solían llamar, se pronuncia en una sala, leyendo una lista. Un grupo de personas se miran incómodos. Es un tema prohibido. Ese nombre no se debería pronunciar. Voy a evitarlo.

Secretos

Estoy aprendiendo a escuchar. Me he dado cuenta, de que cuando una persona no quiere mirar atrás, su única salida es preguntar y preguntar. Por norma general a las personas les gusta hablar de sí mismas, es fácil. Y por la misma norma general no suelen preguntar de vuelta. Y si lo hacen se arregla con más preguntas. No es difícil, la mayoría de las personas en una conversación tan solo esperan su turno para hablar.
 Siguiendo esta premisa estoy aprendiendo mucho. La vida de la gente es interesante, tienen mucho que contar y me agrada merecer oírlo. Como agradecimiento, intento dar mi opinión más sincera de la forma más suavizada, sutil y diluida, en medida de lo posible. Todos saben que es lo correcto, qué no lo es, qué pueden aconsejarles, y si van a seguir el consejo o no. Pero una opinión sincera y sutil se agradece.

sábado, 19 de enero de 2013

Un instante compartido

"No hace tanto que fuimos niños"
B. F. 

Juguetes

¿Jugamos el escondite? Vale en todo el mundo, y no hay casitas. Cierra los ojos, cuenta hasta 2 años, yo me escondo y luego me buscas. Dicen que el mundo es un pañuelo. Suerte. Es lo que siempre hacemos, a mí ya me tocó.
De pequeña pensaba que las personas eran juguetes también, más grandes, se movían y también hablaban. Pero estaban allí para que jugara con ellos. Y es lo que hago. Siempre es emocionante descubrir uno nuevo, todos somos nuevos para otros niños alguna vez. Ahora desearía que se pudiese prolongar indefinidamente la sensación de novedad. Acostumbrarse a algo es demasiado fácil y da miedo. Estoy tratando de encontrar una manera de regresar una y otra vez a la emoción de jugar por primera vez.
 Un patio, lluvia, y la mejor sensación de mi vida. Esperanza. Respirar el aire de aquel pueblo y estar en paz. Sin ataduras, completamente libre, como ahora.
No soy capaz de vivir con una deuda a mis espaldas, en cuanto termine de arreglar las cosas por adelantado seré libre de irme incluso de aquí. ¿Por qué irse de un lugar en el que se está en paz? Porque la paz, la felicidad, la euforia, es una droga. Siempre se busca una dosis mayor. Mientras piense que existe una dosis mayor la buscaré. No he huido para formar una vida, he huido para seguir haciéndolo eternamente. Miedo a las ataduras? Pánico. No siempre es malo, a veces ayuda a seguir. Dejarlo atrás todo, una y otra vez. Es lo que quiero.
Sidney, 4 de la mañana. Salgo a la terraza y observo la ciudad. La única dificultad de esta forma de vida es que hay que evitar pensar en las personas que vas dejando atrás. Pero cuando te acostumbras es tan natural como el respirar. Al ver la vista de la ciudad, las luces, pienso que ya habrá tiempo para mirar atrás. Para algo está el lecho de muerte. Hasta entonces solo pienso en seguir adelante.
Dublin, cercanías de Tara, hogar de los O´Hara. Libertad, historia, el gran río. Las viejas historias parecen cobrar vida. Irlanda y su historia. Un viejo castillo que asoma entre la vegetación.
Kyoto, Nara, Leningrado, Argenitina, demasiadas pistas. Lo dejo. Sería demasiado fácil. Estoy aprendiendo a hablar menos. Mejor dicho hablar más diciendo menos. Es útil.
Una agenda que parece demasiado apretada para ser completamente libre. Engañoso. Las agendas también arden, igual que las personas, los recuerdos, las fotos, los diarios, los planes, las historias, la vida. Al final todo será ceniza.
Juguetes. Tan divertidos, tan fáciles de olvidar.
Ya no recordaba cómo era llenar los pulmones de aire, como era sentir que volaba, como inunda la euforia los sentidos y embriaga de poder. Poder ante todo. Unas alas nuevas, más resistentes cada vez.
Todos quieren ir al cielo, pero nadie quiere morir. Es fácil ser como yo. ¿Quieres jugar conmigo?


Diversión

El fuego es bueno, da calor, ayuda en el día a día. Si quieres puedes quemar cosas en él. Lo que pasa es que el fuego no es un buen acompañante, es peligroso, puede descontrolarse, puede complicar las cosas. No puedes acercarte, te quemas.
Cambiando de tema, la falta de endorfina en el sistema nervioso puede ser un problema, la diversión lo arregla. Y si no, siempre está el chocolate.

viernes, 18 de enero de 2013

Curiosidad

La misma que mató al gato. Siempre estoy pensando en como fue la vida de las personas y me pregunto por qué lo hago. ¿Que impulsa querer conocer más a alguien? Lo bueno de no conocer demasiado a nadie es la intriga. Al descubrir la realidad siempre hay algo que no nos gustará. ¿No sería mejor congelar el conocimiento a cierto nivel? Estar en el mismo punto de una persona siempre. ¿Y en cuanto a dejar que conozcan a uno? Yo suelo establecer límites. Más ahora. Y en cuanto a la ayuda... No siempre hace falta. A veces ves una persona (por la calle, por ejemplo, una persona hipotética) que está feliz, pero tiene un pasado tan trágico que sientes la irrefrenable necesidad de ayudarle. Esa persona no tiene porque necesitar ayuda. Puede que necesite distracción. Aunque visto de cierta forma eso también podría considerarse una ayuda, pero ese tipo es más constructivo (para la persona hipotética, en mi opinión).
Acerca de la distracción, es curioso como funciona la mente humana.  Si la curiosidad no acabó con el gato la imaginación debió de rematarlo.

jueves, 17 de enero de 2013

Cambios

Una mañana tranquila, un café antes de que el mundo despierte. Estar en la oficina a tiempo, entregar el informe que hice ayer... Tal vez un tiempo para mí, para plantear más objetivos. Querer abarcarlo todo. Teatro, presentaciones, congresos, conferencias, cursos, exposiciones, actuaciones artísticas... Y un futuro espectacular ante mis ojos. Viajes, experiencias, sueños cumplidos... Esta es la vida que quiero.
 Es bueno levantarse más temprano de lo necesario, tiempo para pensar en uno mismo, para actualizar los sueños, para decidir qué se quiere de este día.
Creo que el destino me ha echado una mano. En el momento que lo necesitaba recibí una ayuda inesperada, y la agradezco mucho. Necesitaba una oportunidad. Me la he ganado. Esta experiencia está abriendo nuevas formas de pensar para mí. ¿Podría considerarse un viaje espiritual? No voy a volver, por tanto no es un viaje ¿no?

lunes, 14 de enero de 2013

Así empezó

Una estación. Un par de maletas con todas mis pertenencias. Espero el tren. Hay otras personas alrededor. Todos van a coger el mismo tren que yo. ¿Por qué? ¿A dónde van ellos?
Música, cuidadosamente seleccionada para no entorpecer el momento con rarezas de mi persona. Un libro electrónico en mis manos que miro sin ver. No es el momento. Lo guardo. Miro por la ventana. Solo se ve mi reflejo. Es de noche. Viajo sola. El señor amable que me ayudo con el equipaje me mira y sonríe, quizás también se pregunta cuál es mi historia.
¿Es esto una huida? ¿Qué es? Tan repentino y tan dolorosamente lento a la vez, tan contradictorio. A mis espaldas, todo un mundo. Otro diferente por delante. Tengo un poco de miedo.
Las horas pasan una tras otra.

Planes

Hablar de hacer locuras... Suelo acabar haciendo aquello que me propongo. Por lo menos hasta cierto límite. Hacer planes con un matiz de locura me llena, me da un motivo para luchar. Me inspira. ¿Donde quiero vivir? ¿Qué quiero hacer este año? ¿El que viene? ¿El siguiente? Completamente libre. Mis ambiciones no tienen límite alguno. Solo me queda elegir. Tantos encuentros pendientes... Tu a Thailandia y yo a Japón... Tu a China y yo a Nueva York... Es un mundo enorme. ¿Quedamos en Sidney? En un par de años. Ganas de vivir, de seguir adelante, una nueva vida, más y más experiencias. Hoy he visto una ciudad maravillosa, llena de gente increíble, monumentos, catedrales, puentes, calles hermosas... Tanto que ver. Lo estoy deseando. Podría acostumbrarme a esto, a vivir así. Solo necesitaba una oportunidad y la obtuve. No pienso desperdiciarla.

domingo, 13 de enero de 2013

Crecer

¿Desde cuando soy tan mayor? ¿Por qué parezco ya una persona adulta? Solo tengo 21 años... ¿Es bueno o malo?  Es distinto. He empezado vivir muy pronto, al parecer. Aunque yo siempre tuve la sensación de ir por detrás de la gente que me rodeaba. Demasiado privado, lo dejo.
Hablemos de electricidad, o magnetismo mas bien. Esa vibración de la piel que recuerda una descarga de bajo voltaje recorriendo todas las terminaciones nerviosas. Las causas pueden ser distintas: algo inesperado, algo agradable, algo próximo... Curiosa la proximidad. Lo que provoca, en lo que hace pensar.
Cambiando de tema. Mañana es un gran día. Otro gran día. Cada día es grande ahora, cada día trae algo nuevo. La paz interior que llevo días sintiendo se está fijando en mí como algo permanente.

Empezar de cero

Un nuevo mundo para descubrir, miles de lugares nuevos que visitar, miles de personas fascinantes que conocer. Mil experiencias, mil emociones, sensaciones... Una vida. Aparecer en un sitio y simplemente vivir, es imposible de explicar. Demasiado complicado de entender. Mejor dejarlo así. Respirar... Lo echaba de menos. Llenar los pulmones de aire y sentir la euforia del momento. Libertad. Lluvia. Aire.
 Curioso lo de los puentes.
Intimidad para estas asolas con uno mismo es lo que hace falta para darse cuenta de la vida. Es lo que me hacía falta a mí. Cada mañana pensar en el presente. Día a día. Aprender cosas nuevas. Nuevas formas de ver la vida.
Ayer, vi a un vagabundo por la calle. Sentado en un banco. Y sentí unas ganas irrefrenables de hablarle, saber cómo ha sido su vida. ¿Por qué estaba ahí? En un banco. Fue un niño una vez, tuvo unos padres, hermanos, quizás, una familia. A lo mejor ha estado enamorado. ¿En qué momento cambió su vida? ¿Y las personas de la calle? Me pregunto cómo ha sido la vida del señor que va con prisa a la oficina, cómo se ha conocido aquella pareja que parece tan feliz... Quisiera saber cómo han sido sus vidas.
Me vuelvo a centrar en mí. Hace frío.